Diagnóstico tardío de cuerpos extraños en vía aérea en pediatría en el Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín. |
Diagnóstico tardío de cuerpos extraños en vía aérea en pediatría en el Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín.
Late diagnosis of foreign bodies in pediatric airway in the Carlos Andrade Marín Specialties Hospital.
Luis Gonzalo Moreno Sánchez1, Andrea Canelos Dueñas2, Kim Mauricio Calvas Serrano2.
INTRODUCCIÓN. La aspiración de cuerpos extraños es una de las principales causas
de ingreso a urgencias y de morbi-mortalidad en Ecuador en pacientes pediátricos.
El diagnóstico suele ser tardío, por falta de interés de los cuidadores, o por
errores en la valoración. Es importante detectar el cuadro a tiempo, para evitar complicaciones.
OBJETIVO. Demostrar la necesidad de un diagnóstico acertado ante
la alta sospecha en un cuadro dudoso de aspiración de cuerpo extraño. SERIE DE
CASOS. Evaluación de cuatro pacientes de ambos sexos, de entre 11 meses a 15
años de edad con antecedente de ingesta de cuerpo extraño, atendidos en la Unidad
Técnica de Cirugía Pediátrica, del Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín,
durante el periodo 2019-2020. Se realizó la extracción exitosa mediante broncoscopia
rígida en tres de ellos. DISCUSIÓN. La mayoría de pacientes con aspiración de
cuerpo extraño suelen ser menores de 5 años de edad, en contraste con éste estudio,
donde sólo un paciente estuvo dentro de este rango, y el resto fueron escolares
y adolescentes. El cuerpo extraño más común es de origen orgánico; el 50% de los
casos observados fue de origen inorgánico. CONCLUSIÓN. El diagnóstico de aspiración
de cuerpo extraño se condiciona a la obtención completa de datos sobre la
Historia Clínica; requiere una valoración rápida y manejo adecuado por emergencias.
Palabras clave:Broncoscopia; Tos; Neumonía, Obstrucción de las Vías Aéreas; Pediatría;
Cuidado del Niño.
INTRODUCTION. Foreign body aspiration is one of the main causes of emergency
room admissions and morbidity and mortality in pediatric patients in Ecuador. Diagnosis
is usually late, due to lack of interest of caregivers, or due to errors in the
assessment. It is important to detect the condition in time to avoid complications.
OBJECTIVE. To demonstrate the need for an accurate diagnosis in the presence of
high suspicion in a doubtful picture of foreign body aspiration. CASE SERIES. Evaluation
of four patients of both sexes, between 11 months and 15 years of age with a
history of foreign body ingestion, attended at the Pediatric Surgery Technical Unit of
the Carlos Andrade Marin Specialties Hospital, during 2019-2020 period. Successful
extraction by rigid bronchoscopy was performed in three of them. DISCUSSION. Most
patients with foreign body aspiration are usually under 5 years of age, in contrast to
this study, where only one patient was within this range, and the rest were schoolchildren
and adolescents. The most common foreign body is of organic origin; 50% of
the cases observed were of inorganic origin. CONCLUSION. The diagnosis of foreign
body aspiration is conditioned to the complete collection of data on the Clinical History;
it requires a rapid assessment and appropriate emergency management.
Keywords:Bronchoscopy; Cough; Pneumonia; Airway Obstruction; Pediatrics; Child
Care.
La ingesta de cuerpo extraño (CE) es una de las principales razones de consulta en emergencias pediátricas, pese a ser un cuadro clínico previsible. Es indispensable conocer la cronología de los hechos y redactar una Historia Clínica completa1-3. Con solo tener la sospecha de aspiración, se debe actuar de inmediato hasta determinar la necesidad de broncoscopia para su resolución.
Según estadísticas, los CE más comúnmente aspirados son orgánicos4-6, sean semillas o restos alimenticios, y en menor frecuencia inorgánicos como piezas de juguetes, monedas u objetos metálicos corto punzantes.
La realización de una adecuada Historia Clínica es importante, pues el antecedente de ahogamiento o tos con dificultad respiratoria en un niño antes sano, que se encontraba jugando o comiendo, nunca debe ignorarse2,7,8. El examen físico y radiológico puede ser falso negativo después que el episodio crítico ha pasado, por lo que es necesario un alto índice de sospecha para el diagnóstico.
Determinar el tratamiento que cada paciente necesita, dependerá de la localización del CE, siendo la broncoscopia el método diagnóstico y de tratamiento de elección.
Existen diferentes estrategias a nivel mundial que estandarizan datos y llevan un registro internacional sobre las características de los CE aspirados y son una herramienta que permite fomentar mecanismos de seguridad5.
El objetivo de este estudio fue demostrar la necesidad de un diagnóstico acertado ante la alta sospecha en un cuadro dudoso de aspiración de cuerpo extraño.
Se evaluaron cuatro pacientes (2 niños y 2 niñas), de entre 11 meses a 15 años de edad con antecedente de ingesta de cuerpo extraño entre 2 semanas y 1 año de evolución, atendidos en la Unidad Técnica de Cirugía Pediátrica. Los cuerpos extraños retirados fueron tanto orgánicos como inorgánicos. Tabla 1.
Se decide exponer cuatro casos que son relevantes, debido a que tratan sobre cuerpos extraños retenidos en vía aérea por largo tiempo, con síntomas y desenlaces distintos.
Caso 1. Paciente mujer de 15 años de edad, que acudió a emergencias por aspiración de cuerpo extraño con 72 horas de evolución. Se realizó broncoscopia por tres ocasiones sin éxito. Paciente sin sintomatología respiratoria fue dada de alta. Dos semanas más tarde, fue a control por consulta externa y comunicó que el día previo expulsó de manera espontánea un clavo metálico. Desde que fue ingerido permaneció un mes dentro de la vía aérea. Figura 1.
Caso 2. Paciente hombre de 5 años de edad con cuadros de neumonía a repetición sin mejoría, fue tratado en otra Casa de Salud, con persistencia de sintomatología durante un año, por lo que se indagó en la Historia Clínica el antecedente de ingesta de CE. En este paciente se realizó una broncoscopia y se extrajo un grano de café. Figura 2.
Caso 3. Paciente mujer de 9 años de edad, se presentó en emergencias por referir aspiración de CE. Valorada en otra institución de Salud, acude con una radiografía de tórax sin confirmar presencia de CE, por lo que fue dada de alta. Hospitalizada por 2 ocasiones por cuadros de accesos de tos, movilización de secreciones y ronquidos por la noche. Tres meses después, se realizó tomografía computarizada y se comprobó la presencia de CE. Se extrajo tapa de esfero por broncoscopia. Figura 3.
Caso 4. Paciente hombre de 11 meses de edad con antecedente de aspiración de CE de 15 días de evolución, se realizó varios intentos de extracción en otra Unidad Médica de Salud sin éxito. Presentó un paro cardiorrespiratorio que llevó a un deterioro neurológico. Fue referido éste Nosocomio con tos y cianosis por lo que se realizó broncoscopia de emergencia y se retiró un grano de maíz. Figura 4.
De los cuatro casos expuestos se logró la extracción exitosa mediante broncoscopia rígida en tres de ellos, y una paciente expulsó de manera espontánea el CE sin repercusión clínica. Cada caso brindó información diferente, pudiendo exponer la experiencia de la Unidad Técnica de Cirugía Pediátrica del HECAM, y compararla con la de otras Unidades Médicas y así fomentar una base para la generación de investigación futura.
El retraso en el diagnóstico por no contar con una Historia Clínica completa o por no tener la evidencia de imagen, son factores que llevan a complicaciones y al incremento de la mortalidad en pacientes con antecedente de aspiración de cuerpo extraño (ACE)2,7,9. El diagnóstico a tiempo es un desafío incluso para el personal médico con suficiente experiencia, muchas veces los síntomas son muy sutiles o no son de tipo respiratorio franco10-14. Por esto la ACE puede pasar desapercibida y presentarse tarde, cuando el paciente muestra complicaciones propias del cuadro. La incidencia exacta de ACE es un dato con el que no se cuenta, teniendo en cuenta que muchos casos no están reportados4-12, pero se conoce que la gran mayoría son pacientes menores de 5 años de edad, en contraste con éste estudio, donde sólo un paciente estuvo dentro de este rango, y el resto fueron escolares y adolescentes. El tipo más común de cuerpo extraño ingerido varía mucho según regiones, siendo las semillas las más comunes en la Sierra13,15-19.
Médicos Generales, emergenciólogos, pediatras, neumólogos y especialistas en cirugía pediátrica, deben estar capacitados para enfrentarse a un escenario de emergencia y conocer que, al estar ante un cuadro incierto, sin encontrar el diagnóstico preciso, se debe sospechar de ACE3-12. La relación terapéutica de los médicos con las familias de pacientes pediátricos permite proporcionar un papel educativo con respecto a la prevención de ACE tanto como a la reacción y respuesta frente a este escenario16-18.
El programa Susy Safe, con varios países miembros y asociados en el mundo, es un proyecto europeo de registro de vigilancia de lesiones causadas por ingestión, aspiración, inhalación o inserción de cuerpos extraños relacionados con productos industriales, con especial interés en juguetes. Se creó un sistema de vigilancia de las lesiones causadas por los diferentes cuerpos extraños ingeridos, que proporcionó un perfil de análisis de riesgos para cada uno de los productos que provocan una lesión. Además, ofrece una evaluación de cómo las disparidades socioeconómicas entre ciudadanos y ubicaciones pueden influir en la probabilidad de presentar ingestión de CE. Tiene como objetivo involucrar las Asociaciones de Consumidores y/o las Autoridades Nacionales de Vigilancia del Mercado en la recopilación de datos y educación de los consumidores5,17-20.
El diagnóstico de ACE se condiciona a la obtención completa de datos sobre la Historia Clínica; requiere una valoración rápida y manejo adecuado por emergencias. Se debe tener un alto índice de sospecha en todo paciente pediátrico con clínica de ACE. Es un evento que se puede evitar con prevención primaria.
ACE: Aspiración Cuerpo Extraño; CE: Cuerpo Extraño.
AC: Concepción y diseño del trabajo, redacción del manuscrito. AC, KC, LM: Recolección/obtención de resultados. LM: Redacción del manuscrito, revisión crítica del manuscrito. Todos los autores leyeron y aprobaron la versión final del artículo.
Luis Gonzalo Moreno Sánchez. Doctor en Medicina y Cirugía, Universidad Central del Ecuador. Diploma superior de cuarto nivel en desarrollo local y salud, Universidad Técnica Particular de Loja. Especialista en Cirugía Pediátrica, Universidad Internacional del Ecuador. Médico Especialista en Pediatría, Unidad Técnica de Pediatría del Área de Cirugía, Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín. Quito-Ecuador. ORCID ID: https://orcid.org/0000-0003-4809-5267
Cabrera Ramón Mayra Elizabeth. Médica General, Universidad Nacional de Loja. Médico General en Funciones Hospitalarias, Unidad de Plástica y Reconstructiva, Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín. Quito-Ecuador. ORCID: https://orcid.org/0000-0002-1642-0558
Kim Mauricio Calvas Serrano. Médico General, Universidad Nacional de Loja. Posgradista de Cirugía Pediátrica, Universidad San Francisco de Quito. Quito-Ecuador. ORCID ID: https://orcid.org/0000-0003-0403-4403
Se utilizaron recursos bibliográficos de uso libre y limitado. La información recolectada está disponible bajo requisición al autor principal.
La publicación fue aprobada por el Comité de Política Editorial de la Revista Médica Científica CAMbios del HECAM en Acta 002 de fecha 20 de mayo de 2021.
Se trabajó con recursos propios de los autores.
Los autores reportaron no tener ningún conflicto de interés personal, financiero, intelectual, económico y de interés corporativo.
Se deja en constancia el agradecimiento a la colaboración tanto del personal médico involucrado como de los pacientes. El trabajo se realizó en la Unidad de Cirugía Pediátrica del HECAM.